La literatura contemporánea ecuatoriana se presenta como un vibrante caleidoscopio que aborda las complejidades de la sociedad moderna, explorando temas como la identidad y el paso del costumbrismo a una tendencia de expresión latinoamericana y global. Este ensayo destaca la obra de exponentes notables de nuestra literatura del siglo XX con altos exponentes como Jorge Enrique Adoum y Raúl Pérez Torres, y de lo que va del siglo XXI, con Leonardo Valencia, María Fernanda Ampuero y Mónica Ojeda.
Adoum, con obras fundamentales para la literatura nacional como «Entre Marx y una Mujer Desnuda», reflexiona sobre la política, la identidad y la alienación en un entorno altamente politizado e interconectado. A su vez Torres, con “La teoría del desencanto», aborda los cambios profundos y caóticos de Quito, en medio de decepciones por promesas incumplidas y los frágiles proyectos de la contra cultura.Más adelante, Leonardo Valencia, en «La Fiesta en el Infierno», explora con nuevo enfoque las tensiones entre tradición y modernidad. En la literatura contemporánea ecuatoriana en que va quedando de lado el abordaje de la identidad indígena como nicho único de reivindicación cultural, incursiona en temas como la mujer y su rol con una visión audaz como la que presentan María Fernanda Ampuero y Mónica Ojeda.
Esta etapa de la literatura nacional no solo refleja la realidad actual de, sino que proyecta una mirada hacia el futuro, desafiando fronteras literarias y enriqueciendo el panorama cultural de la nación.
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